jueves, 28 de agosto de 2014

Golpea a su novia y la abandona casi muerta en la calle

Ciudad Juárez

Golpea a su novia y la abandona casi muerta en la calle

Laura fue encontrada con severas heridas y ensangrentada, pero un juez liberó al agresor al asegurar que no hubo delito en flagrancia.
Laura Guerra y su novio Fernando Vargas Molina estaban en el bar Ying Yang en Ciudad Juárez. Los dos bebían hasta que discutieron. "Él se enojó en su borrachera, la jaloneó frente a la gente, la golpeó varias veces en el bar y la subió a su camioneta Suburban azul. En el camino la siguió agrediendo", contó Carlos*, conocido de la joven y quien pidió omitir su verdadero nombre por cuestiones de seguridad.

Laura tiene 24 años y es egresada de la carrera de biología de la Universidad de Texas en Austin; Fernando trabaja en Pemex, es egresado de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y sabe boxear, detalló Carlos.

Uno de los golpes que recibió Laura a bordo de la camioneta la dejó inmóvil. Fernando detuvo la marcha de su vehículo en el parque ubicado en las avenidas Vicente Guerrero y del Charro. Cargó el cuerpo y lo tendió sobre la vía pública, regresó a su camioneta y arrancó.

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De acuerdo con un reporte del Inegi, 63 de cada 100 mujeres de 15 años y más han padecido algún incidente de violencia, ya sea por parte de su pareja o de cualquier otra u otras personas.

En el reporte publicado en 2013, ese instituto informó que Chihuahua presenta la cifra más alta de homicidios contra mujeres con una tasa de 22.7 asesinatos por cada 100 mil mujeres, le sigue Guerrero (10.4), Nayarit (9.7), Nuevo León (9.5), Sinaloa (7.9), Durango (6.9), Baja California (6.0), Morelos (4.7) y Tamaulipas (4.6).

Las pruebas de la agresión y la denuncia se presentaron ante la Fiscalía de la Zona Norte, se entregaron "todas las evidencias de que eso fue un intento de homicidio, pero aun así (lo) dejaron salir impune", reprochó Carlos, quien rindió testimonio ante las autoridades.

Fernando fue liberado 48 horas después de ser detenido por policías municipales. Los agentes cometieron el error de actuar sin antes tener una orden y sobre todo arrestarlo en su casa. Un juez determinó que "su detención no estaba apegada a derecho, además de que no hubo delito en flagrancia", explicó Torres.

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